La novia del viento

La novia del viento de Oskar Kokoschka (1914). Óleo sobre lienzo, 180 x 220 cm.

Luego de la explosiva publicación de las interpretaciones de Eduardo Esparza (“Leda y el cisne” de Miguel Ángel), Pedro Alcántara Herrán ("Estudios sobre la mecánica de los músculos de los orificios del cuerpo” de Leonardo Da Vinci), Ángel Loochkartt ("Pubertad" de Munch), Fernando Maldonado ("La Venus del espejo" de Velásquez) y Luis Cabrera ("Anochecer de verano" de Edward Hopper), esta semana le corresponde el turno a la artista caleña Adriana Patiño, quien decidió utilizar su pirotecnia interior para plasmar un clásico que tiene el bello título de La novia del viento o La tempestad, ejecutado en 1914 por el pintor expresionista austríaco Oskar Kokoschka (1886-1980). 
Esta maravillosa obra perteneciente al museo Offentliche Kunstsammlung de Basilea, fue realizada por el artista en homenaje a su amante Alma Mahler, en cuya intensa y cinematográfica vida prodigó su pasión a varios reconocidos creadores como Klimt y Kokoschka, además del arquitecto Walter Gropius, del novelista Franz Werfel y por supuesto del compositor Gustav Mahler.
Aquí la versión realizada por la pintora colombiana de esa tela que inmortalizaría el amor de Oskar y Alma —aquella mujer que “actuaba para seducir a los dioses”, y a quien como es sabido la “perfección le parecía aburrida”.

Los artistas que trabajan ya sus interpretaciones para completar este planisferio erótico son, entre otros: Jim Amaral (Detalle del fresco Tumba de los toros, escuela pictórica de Tarquinia, 550-510 a.C), Germán Londoño (“Odalisca con esclavo” de Ingres), Nicolás De la Hoz (Venus Anadiómena de Tiziano), Augusto Rendón (“Hendrickje” de Rembrandt), Gilberto Cerón (“Gabrielle DÉstrées y su hermana”), y Armando Villegas (Homenaje a Klimt).